Lo inesplicable, ¡Al cajón!

Un día, no hace mucho, encontré en un viejo cajón una foto. En ella no había color, no había imagen,  no había nada. Era totalmente translúcida, no mostraba imagen pero a la vez, no dejaba ver a través de ella con nitidez. Eso me cabreaba, yo quería las cosas en el momento, quería ver lo que en ella había, lo que en ella se plasmo cuando se hizo, todo por la curiosidad e impulsividad que me caracteriza. Pero por más que pasaron las horas y me empeciné en no alejarla de mí hasta conseguirlo, esas sombras que creaba ante mí esa imagen y su pasado no se disiparon…

Sonó el teléfono, levante la vista por primera vez en la tarde y descubrí que ya era de noche. Por lo que se ve me había llevado horas y horas esperando ver algo que no iba a pasar. Volví a la realidad, conteste el teléfono, colgué, se habían equivocado. Pensé en que día estaba, no me acordaba, solo que ayer había tendido la ropa y debía recogerla, salí al patio y me sorprendí al ver que estaba repleto de hojas ¡si hacia 10 minutos lo había barrido!, Bueno el viento habrá hecho que vuelvan a caer, me dije. Levante la vista hacia arriba y divisé, como cada prenda que creí limpia y seca estaba sucia y de ellas colgaban unos hilos... pensé asombrada que no podía ser lo que estaba viendo, la ropa tenía telarañas, estaba escueta y sucia.

Entre de nuevo a la casa, busque por todos lados intentando encontrar una explicación, pero no la encontraba. Hasta que decidí encender la tele, busque en el periódico la programación del día 3 de Noviembre, es decir, hoy  y venía que en  cuatro echaban mi película favorita. Sonriente cogí el mando y busque el canal, pero no, no era. ¿Que raro? pensé, esa no es la película que pone aquí. Decidí salir a la calle y averiguar.  Lo hice y le pregunte a una mujer que pasaba por mi lado… “¿Perdone, me podría decir a que día estamos hoy?”… ella muy sonriente me contesto…”1 de abril”... Yo atónita no creía que hubiese pasado tanto tiempo, si me parecía ayer cuando tendí la lavadora, hace unas horas cuando barrí el patio y unos segundos cuando encontré la foto.

Volví a casa e intenté recuperar todo lo perdido pero ya era algo superior a mí y que no podía recuperar. Así que me dispuse a intentar coger el control desde donde estaba, lo primero que iba a hacer , era volver a lavar la ropa las cuales había dejado allí tendida durante 6 largos meses, después volvería a barrer el patio, porque lo necesitaba bastante  y me sentiría mucho mejor viéndolo limpio y penetrando en las baldosas la luz del sol y por último guardaría la foto en una caja, en la caja de lo que fue y no le buscaría más explicaciones, ni esperaría que las dudas se disiparan ante mis ojos, por el hecho de que por culpa de cegarme tanto a ella perdí cosas que ahora no podré recuperar.